Soltar es parte de crecer
Puede sonar un poco contradictorio, pero para crecer en cualquier aspecto de la vida necesitamos aprender la importancia de soltar y dejar ir.
Ya sea culpa, amor, pérdida, ira, o traición… el cambio nunca es fácil, pero siempre va a ocurrir y es necesario afrontarlo, sobre todo para que podamos evolucionar.
Y no, no es cuestión de simplemente decir “suéltalo, déjalo ir y sigue adelante”. Va mucho más allá de ello. Se trata de luchar, aguantar y perseverar.
Ahora bien, el cambio puede ser visto como algo emocionante o aterrador, pero, independientemente de cómo se vea, todos debemos enfrentar el hecho de que el cambio es la naturaleza misma de la vida.
La importancia de soltar
El acto de soltar es una ley universal. Una ley que tiene como finalidad atraer y acoger cosas mejores en la vida. Claro, debes crear espacio para ello y es aquí donde entra en juego el cortar cuerdas, centrarse en lo que importa y dejar ir lo que no importa.
Por otro lado, no soltar es algo así como abrir la puerta de la casa para invitar a alguien a entrar, pero darse cuenta de que hay un fantasma del pasado parado en la puerta, impidiendo que esa persona entre.
La razón por la que esto último sucede a menudo tiene nombre, y se llama: miedo. Miedo a lo desconocido, miedo a que lo que está por venir no sea mejor que lo que ya tenemos (incluso si eso que tenemos nos está causando dolor).
No nos damos cuenta de que al intentar protegernos de los problemas y el dolor, en realidad estamos creando más problemas y más dolor. Y solo cuando el dolor se vuelva insoportable, decidiremos dejarlo ir.
No dejes que te detenga el miedo
Necesitamos entender que el miedo es una experiencia más que forma parte de la vida. Nuestro trabajo es reconocerlo y trabajar para liberarlo. De lo contrario, si solo te refugias en él, esto te traerá consecuencias negativas.
Dejar ir es parte del viaje hacia nosotros mismos. Se trata de transformación, crecimiento y reconexión con tu esencia. Se trata de reconocer nuestras emociones, sentirlas, aceptarlas y luego dejar que todo fluya, directamente a través de nosotros, para que no nos bloquee ni limite en el futuro.
En el momento en que nos demos cuenta de esto y hagamos un trabajo correcto para gestionar el miedo, cada vez nos resultará más fácil avanzar, evolucionar y crecer hasta convertirnos en nuestro ser más elevado.
¡Así que, deja ir lo que te está agobiando y libérate! Reclama tu responsabilidad y luego, a partir de ello, crea algo mejor.
5 cosas que puedes hacer para soltar y dejar ir más fácil:
- Grita. No contengas las lágrimas, déjalas fluir y libera toda clase de tensión. Date espacio.
- Da las gracias y perdona. Ya sea en persona, en papel o en pensamiento. Ya sea que se trate de ti mismo o de otra persona.
- Escucha y concéntrate en lo que tú necesitas y no en lo que otros podrían “pensar que necesitas”.
- Concéntrate en las oportunidades que se avecinan. Recuerda que cuando una puerta se cierra, otra se abrirá.
- Aprende a sentirte cómodo estando incómodo.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.